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Como bien diría el filósofo francés Michel Foucault, los sugerentes ensayos que reúne en su nuevo libro el historiador y politólogo colombiano Julio César Carrión Castro constituyen una “caja de herramientas” para refinar el pensamiento crítico en esta época de globalización neoliberal en que el expolio y la deshumanización que ha impuesto un sistema forajido como el capitalista es la característica predominante.
El maestro Carrión Castro, incansable divulgador cultural y activista social y político de la causa emancipatoria latinoamericana, se ha dado a la tarea de compilar una serie de interesantes y profundos ensayos sobre literatura, filosofía, cine y urdimbres de la cotidianidad que permiten analizar la incesante y conflictiva realidad de la sociedad del siglo XXI.
Esa recopilación que posibilita la reflexión dialéctica sobre los fenómenos de nuestro tiempo dio como resultado la edición del interesante trabajo bibliográfico que lleva por título ‘Herramientas para pensar. Arqueología del saber’ (Ego Ludens, abril 2024) que fue presentado recientemente en la Feria Internacional del Libro de Bogotá.
Como bien lo señala el prologuista del libro, el excongresista Jairo Rivera Morales, la “pluma levantisca y contestataria” de Carrión Castro, se yergue en estos ensayos bien escritos pero sobre todo de profunda cavilación, “contra las concepciones que han convertido la academia y la política en simples escenarios de espectáculo; es decir, contra la farándula como enseñanza y como ejercicio de la vida pública. Todo lo que él critica desde su cáustica secuencia volteriana hace parte de un cuadro en el que prevalece la simulación como forma de existir; y resulta concomitante con las concepciones torcidas que sobre el desarrollo y el progreso se han gestado dentro del ámbito del capitalismo tardío”.
Agrega Rivera Morales que en estas páginas se manifiestan el afán y obsesión de Carrión Castro “por hacer parte de las cruzadas contra las concepciones regresivas, bloqueadoras de la inteligencia creadora y paralizantes de la dinámica social, como aquella que ha proclamado ‘el fin de la historia’, o como la otra que postula la entronización del pensamiento único. Las concepciones dialécticas sobre la naturaleza y la sociedad, sobre la cultura y la historia, han interpretado –desde los remotos tiempos de los charvakcas de la antigua India hasta el momento actual- el mundo como una permanente formación cambiante”.
Por su parte, el autor de estas “herramientas para pensar” manifiesta en la presentación de la obra que ha recurrido tanto al lenguaje literario como cinematográfico porque posibilitan “no sólo interpretar la esquiva realidad sino crearla y recrearla, -desde una pretendida objetividad o, desde el inconmensurable espacio de lo ficticio, de los sueños, y demás esfuerzos imaginativos y poéticos-, mostrándonos de manera ligera y agradable, los hechos fácticos y las crudas imágenes de una realidad, que puede ser insoportable. En las imágenes literarias o en las caleidoscópicas del cine, repito, se puede interpretar y corregir el mundo”.
Colige Carrión Castro que las técnicas expresivas del cine y la literatura que además son compatibles “sirven como herramientas adecuadas para tratar de entender la vida, esa vida que con todos sus encantos y todas sus miserias, puede entenderse como un sueño o, quizá, como una insoportable pesadilla”.
Se lamenta de que en esta época de globalización, exacerbado consumismo y obscena manipulación mediática se vive “la total subsunción de lo humano al capital. Época que, desechando los fundamentos reales de la existencia humana, nos ha impuesto ya la vida social como espectáculo”.
Con este nuevo aporte bibliográfico el maestro Carrión Castro no solo invita a pensar sino que sus reflexiones incitan a la acción, porque como exhortaba el formidable filósofo italiano Antonio Gramsci, es preciso organizarse porque la lucha por la emancipación requiere de toda la fuerza y disposición de los sectores sociales comprometidos y convencidos de que otro mundo mejor sustentado en el humanismo, no solamente es posible sino que es urgente para que no nos consuma la crisis civilizatoria y la barbarie ocasionadas por el capitalismo.
