
RESUMEN AGENCIAS /
El Gobierno de Estados Unidos ordenó el despliegue de tres mil soldados más en servicio activo a la frontera con México, bajo la dirección del Comando Norte del Pentágono (Northcom) para “mantener la seguridad en la frontera sur”, al tiempo que el presidente estadounidense, Donald Trump, afirmó que febrero tuvo “el menor número de migrantes irregulares tratando de entrar” en su país.
De esta manera, Washington busca frenar la migración latinoamericana hacia EE.UU., haciendo gala de su agresivo poderío militar y tratando como delincuente a toda persona que busqué traspasar la frontera de México hacia el norte.
El Pentágono emitió un comunicado destacando el despliegue militar: “Estas unidades elevarán el número de fuerzas del Título 10 a lo largo de la frontera sur a aproximadamente nueve mil” efectivos, quienes “reforzarán y ampliarán las actuales operaciones de seguridad fronteriza para sellar las aduanas y proteger la integridad territorial de Estados Unidos”.
De los soldados asignados a la frontera con México, 4200 responden a órdenes federales y 5000 pertenecen a la Guardia Nacional bajo el control de los gobernadores.
“Casi 2400 soldados del segundo equipo de combate de la Brigada Stryker, División 4 de Infantería” serán enviados a la zona limítrofe, junto con “500 efectivos de la Brigada 3 de Aviación de Combate” y el 19 Destacamento de Asuntos Públicos de Fort Riley, indicó el Northcom, una de las 11 divisiones unificadas del Departamento de Defensa estadounidense, que encabeza el secretario Pete Hegseth.
Washington presume potencia de fuego de los vehículos Striker
Según información del Ejército estadounidense, las brigadas castrenses Stryker proporcionarán asistencia a las fuerzas terrestres: una combinación de movilidad, potencia de fuego y protección.
El comunicado destacó: “Las tropas están equipadas con vehículos Stryker, que permiten a la infantería cerrar distancias y destruir enemigos ligeramente ciegos utilizando el sistema de la estación remota de armas, y con este apoyo los soldados desmontados pueden destruir al enemigo en combate cercano”. Los tanques Stryker son “altamente móviles”.
Entre las tareas en la frontera sur se incluirán “detección y vigilancia, transporte, almacenamiento y apoyo logístico, mantenimiento de vehículos y asistencia de ingeniería. El personal no realizará ni participará en operaciones de interdicción o deportación”, amplía el documento del Pentágono.
La más reciente vez que las brigadas Stryker brindaron apoyo en la frontera sur fue en 2012; en la misión actual proporcionará “capacidades militares únicas para proteger y mantener la soberanía, la integridad territorial y la seguridad en la frontera sur, una de las principales prioridades del Departamento de Defensa”.
En tanto, las tropas de la Unidad de aviación, que según su sitio web realizan operaciones de rescate, aumenta a 9000 la cifra de militares destacados en la línea divisoria apoyo logístico y reabastecimiento, “ayudarán en el movimiento de personal, equipos y suministros; y proporcionarán capacidades de evacuación médica aérea”, señaló el Northcom.
“Estos despliegues aportarán agilidad y capacidad adicionales para impulsar los esfuerzos por detener el flujo de migración irregular y drogas en la frontera sur”, dijo el general Gregory Guillot, jefe del Comando Norte.
El personal militar participa desde 1990 en labores fronterizas contra la migración, tráfico de drogas y crimen transnacional.
Este año, el Northcom fue designado líder operativo del Departamento de Defensa para el empleo de fuerzas militares estadunidense con el fin de implementar las órdenes ejecutivas del presidente Trump en la frontera sur.
En este contexto, Trump aseguró el pasado sábado 1 de marzo que sólo 8326 personas intentaron ingresar sin autorización a Estados Unidos en febrero “en mi primer mes completo como Presidente” frente a “300 mil ilegales cruzando en cualquier otro mes” en la administración de Joe Biden, lo que significa –según él– que “la invasión de nuestro país ha terminado”, publicó en su red Truth Social.