Dicen ¡No! a la reforma a la salud, pero se apropian de $43.000 millones del Estado

LA RADIO AHORA /

Seis de los congresistas que se oponen rabiosamente a la reforma a la salud y a todo el conjunto de reformas sociales del Gobierno del presidente Gustavo Petro, forman parte de una red de corrupción bautizada por los organismos de investigación como «Las Marionetas».

El grupo de senadores, encabezado por el uribista Ciro Ramírez, quien fue capturado recientemente por orden de la Corte Suprema de Justicia, son señalados de apropiarse ilegalmente de cerca 11 millones de dólares (unos 43.000 millones de pesos), representados en 13 contratos que fueron direccionados a través del Departamento Administrativo de la Prosperidad Social (DPS).

Senadores de ultraderecha comprometidos en grave trama de corrupción en el sector salud.

Según las pruebas recaudadas por la Policía Judicial, el senador del Centro Democrático, Ciro Ramírez, está relacionado con la trama encabezada por el fallecido exsenador liberal Mario Castaño, quien aceptó en junio pasado haber liderado una estructura delictiva, de la que también formaban parte otros congresistas, alcaldes y funcionarios, para apropiarse de recursos del Estado.

El senador Castaño falleció en la cárcel La Picota de Bogotá, el pasado 18 de noviembre, en extrañas circunstancias, al parecer por un paro cardiaco según fuentes oficiales.

En el mentado grupo «Las Marionetas» aparecen también los senadores Carlos Abraham Jiménez y Carlos Fernando Motoa, de Cambio Radical; Juan Samy Merheg y Miguel Ángel Barreto del Partido Conservador y Juan Felipe Lemos Uribe, del Partido de la U.

Los hechos de corrupción, protagonizados durante el Gobierno de Iván Duque, datan del año 2021 y se relacionan con el direccionamiento irregular, de por lo menos 13 contratos de obras en los departamentos de Quindío, Valle del Cauca y Tolima, entregados a contratistas previamente escogidos por los senadores de este grupo en mención.

Pablo César Herrera, exgerente del Proyecta Quindío y hoy en día uno de los testigos principales de la Fiscalía y de la Corte Suprema de Justicia, reveló detalles del organigrama de la red de corrupción, que se dedicó a manipular la contratación pública para sus intereses políticos y personales.

El grupo era encabezado por el senador uribista Ciro Ramírez y estaba integrado además por otras personas, como los contratistas Alejandro Noreña Castro, Anderson González, Giancarlo Storino y Katherine Rivera, quien formó parte de la Unidad de Trabajo Legislativo (UTL) de Ramírez en el Senado.

Ciro Ramírez llegó a la política de la mano de su padre, el también congresista Ciro Ramírez Pinzón, quien fue capturado, y luego condenado, por el escándalo de la parapolítica, bajo la sindicación de concierto para delinquir agravado​ y promoción de grupos al margen de la ley.

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