POR HEDELBERTO LÓPEZ BLANCH / CRONICÓN.NET /
Cada día se comprueba que algunos personajes que han llegado al poder en América Latina bajo el manto propagandístico de proyectar posiciones de izquierda solo han estado disfrazados, o mejor dicho infiltrados, para favorecer a Estados Unidos en su objetivo de mantener el control político y económico en la región.
El caso más reciente es el del inefable presidente chileno Gabriel Boric que apoyado por gran parte del pueblo y en especial por los estudiantes, triunfó en las elecciones de 2021 bajo la aureola de tener ideas progresistas en contraposición a su oponente ultraderechista José Antonio Kast.
Boric fundó en 2018 Convergencia Social uno de los partidos que conforman el Frente Amplio y jugó su papel para alcanzar un referéndum constitucional en octubre de 2020 tras las violentas represiones estudiantiles lanzadas por el entonces presidente ultraneoliberal Sebastián Piñera.
Desde su iniciación como Presidente en marzo de 2022 se fue acercando a las posiciones de Estados Unidos en la región, especialmente contra los gobiernos progresistas.
Así, a mediados de 2023 arremetió contra el presidente nicaragüense Daniel Ortega, tildándolo de “dictador” y de reprimir a su pueblo a la par que llamaba a la OEA a imponer sanciones contra Managua.
Su apología sobre el expresidente pinochetista Sebastián Piñera tras su fallecimiento en un accidente en febrero de 2024 resultó verdaderamente vergonzoso.
En un discurso ante el Congreso Nacional afirmó “Despedimos a un político que, desde sus convicciones e ideas, sirvió con amor a la patria y trabajó tenazmente por verla crecer y progresar. Esto me permite afirmar que Sebastián Piñera fue un hombre que siempre puso a Chile por delante, que nunca se dejó llevar por el fanatismo ni el rencor. Todos quienes estamos en política debiéramos tomar nota de estas virtudes”.
Recordemos que, ante el aumento del transporte público en 2019, Piñera ordenó a la fuerza pública reprimir las manifestaciones con saldo de 45 jóvenes asesinados, centenares de heridos, miles de detenidos que sufrieron vejaciones y violaciones en las cárceles del régimen. Los carabineros, además de lanzar gases lacrimógenos, dispararon escopetas de perdigones contra la cara de los jóvenes por lo que 545 perdieron la visión de uno o de sus dos ojos.
Ahora, al seguir la política de Estados Unidos hacia Venezuela para tratar de eliminar el ejemplo de soberanía que representa para la región, Boric se lanzó abiertamente contra Caracas al enfatizar que “el Tribunal Superior de Justicia termina de consolidar el fraude. El régimen de Maduro obviamente acoge con entusiasmo su sentencia que estará signada por la infamia. No hay duda de que estamos frente a una dictadura que falsea elecciones, reprime al que piensa distinto. La dictadura de Venezuela no es la izquierda. Es posible y necesaria una izquierda continental profundamente democrática y que respete los derechos humanos sin importar el color de quien los vulnere”.
Mientras Venezuela da oportunidades a sus ciudadanos e incrementa los programas sociales, Chile con una extensa lista de violaciones de los derechos humanos, se une a Washington y a la OEA para tratar de derrocar al Gobierno Bolivariano.
También es notable el apoyo que Boric le ha dado al mandatario fascista de Ucrania,
Volodímir Zelenski, marioneta tanto de Estados Unidos y la OTAN en su propósito por aprisionar militar y económicamente a Rusia.
El Comando Sur se instala en Chile
Tras la notoria abyección de Boric a Washington no es de extrañar que ahora el Comando Sur de Estados Unidos se instale a sus anchas en Chile para desde el sur del continente auscultar estrategias que le permitan ir tras los recursos naturales de la región.
Hay que recordar que precisamente fue la generala Laura Richardson, jefa del del Comando Sur, quien se hizo conocida por sus polémicas afirmaciones sobre la gran cantidad de recursos naturales de América del Sur que hay que «cuidar».
Pues bien, Santiago de Chile acaba de ser sede de la Conferencia de Defensa Sudamericana 2024 (Southdec 24) presidida por la generala Richardson y el jefe del Estado Mayor Conjunto de Estados Unidos, general de aviación Charles Brown.
Durante los tres días en que se realizó la Conferencia de Defensa, la generala Richardson insistió en que «los gobiernos comunistas están intentando apoderarse de todo lo que puedan aquí, en el hemisferio occidental». Por supuesto aprovechó para hablar de Venezuela extensamente convirtiéndose en uno de los temas importantes del primer día de conferencia.
Por su parte, el General Brown, del Estado Mayor Conjunto de EE.UU. publicó un mensaje en su cuenta de la red social X, en el que agradecer a Chile por facilitar las condiciones y la infraestructura necesarias para la realización de este evento militar que organizó el Comando Sur.
De la jornada inaugural, se hizo viral una de las fotografías en la que se puede observar a la anfitriona ministra de Defensa de Chile, Maya Fernández Allende, rodeada y con cara de satisfacción, entre otros, por militares estadounidenses.
La imagen remeció las redes sociales, porque distintos dirigentes políticos y sociales de su país, recordaron que fue Estados Unidos el que promovió, organizó y financió las condiciones para el golpe de Estado que acabó con la vida de su propio abuelo, el presidente Salvador Allende Gossens, aquel fatídico 11 de septiembre de 1973.
Otra muestra más de la abyección del Gobierno Boric a Washington.
Subyugados a los pies de Washington
Otro ejemplo de traición de mandatarios que han llegado con aureola progresista al poder y que no se puede dejar de nombrar es el del impresentable ecuatoriano Lenín Moreno Garcés, que bajo el disfraz de ser un fiel miembro del Partido Alianza País y que trabajaría por el bienestar de su pueblo como lo había hecho su antecesor, Rafael Correa, cambió tras ganar las elecciones en 2017.
Sus relaciones con Estados Unidos aparecieron de inmediato y se fortalecieron en 2019 con las visitas a Quito de Thomas Shannon, exsubsecretario de Estado para Asuntos Políticos; David Hale, exsubsecretario para Asuntos Políticos; Mike Pence, exvicepresidente; y Mike Pompeo, ex secretario de Estado. En febrero de 2020, Moreno viajó a Washington donde fue recibido con todos los honores por Donald Trump con quien firmó varios acuerdos.
En sus cuatro años de desgobierno dejó a Ecuador en una crisis económica-social-sanitaria lamentable, unida a una corrupción institucionalizada, con elevados índices de pobreza y desempleo, y una enorme deuda contraída con el Fondo Monetario Internacional. El daño que le hizo a las fuerzas progresistas de la región fue incalculable.
Ante estos ejemplos, habrá que observar ahora si otros gobiernos que últimamente han llegado al poder con halo de progresistas siguen el camino de Boric o Moreno y dan la espalda a sus pueblos y a la integración latinoamericana.
Como expresara José Martí: “Vale más un minuto de pie que una vida de rodillas”.